Semblanza de la Decana

LIGIA, LA DECANA DEL BICENTENARIO

 “Una simple lectora”, así se auto califica Ligia López De Castilla Delgado, quien desde el mes de enero es decana nacional del CPP.

Fue elegida por todas las bases regionales del país para conducir a la institución deontológica hasta finales de 2021, período que coincide con la celebración de nuestro esperado Bicentenario.

Ella revela que el germen del periodismo surgió sin saberlo entonces, en las charlas de sobremesa de la infancia en las que su papá lanzaba preguntas a su numerosa prole, sobre actualidad, personajes y ciudades del mundo, cualquier tema de cultura general.

Y su papá no era un profesor sino un oficial del Ejército con gran amor por la cultura y por las ciencias.

Ella leía, desde los cinco y seis años todo lo que caía en sus manos aunque en la época de su infancia casi no había literatura infantil; leía todo lo que tuviera páginas impresas, aunque no resultara interesante para su corta edad ni comprendiera siempre el contenido. Se trataba solo de leer.

Sus años juveniles  en La Prensa, la inolvidable cueva de Baquíjano, bajo la batuta de don Pedro Beltrán, los describe como lo mejor que pudo haberle ocurrido y que justificó su decisión de hacerse periodista, porque  a los 15 años había optado  por la abogacía. Pero  intervino el destino y llegó tarde a la inscripción en Derecho en la PUCP y ello la condujo a “conformarse” con la Escuela de Periodismo que todavía no cerraba matrícula.

Con don Pedro Beltrán aprendió el valor de la exactitud,  de la precisión, de la búsqueda de la excelencia, a contrastar fuentes, a ser responsable; que el periodismo interroga al poder y debe ser veraz, plural, debe ser útil al país.  

Cuando ya no estuvo Beltrán en La Prensa, renunció y pasó a Panamericana Televisión donde poco tiempo después, con 29 años de edad y siendo mamá de su primera bebé, aceptó el reto de dirigir el noticiero emblemático de la televisión de aquella época, El Panamericano. Como primera mujer directora de un noticiero de alcance nacional, su nombramiento produjo titulares en varios periódicos que marcaban lo excepcional de la situación: “Horror, mujeres al poder” fue un título bromista aunque elocuente.

Continuó su carrera en diversos medios e instituciones, como lo hacen los periodistas de hoy y lo harán en el futuro.

En resumen, 50 años como periodista y toda una vida dedicada a la lectura.